Mis pobres cervicales se echan a temblar cada vez que el enano hace esta pregunta: “Mamá, ¿me bajas la casita?” Y es que la buena de “la casita” pesa su disfrute en oro…
Antón tiene una hermana mayor y, además de sus pijamas rosas y camisetas interiores con lacitos (únicas prendas aprovechables gracias a la intimidad del hogar), ha heredado también sus juguetes. Ha sido una suerte porque, seguramente y debido a su género, quizás nunca le hubiésemos comprado (o quizás no tantas) muñecas y complementos varios (vestidos, cunas, sillas, biberones mágicos, comiditas, tronas…). Y nunca hubiésemos imaginado que, precisamente por las dificultades motrices derivadas de su discapacidad, el fútbol y aficiones de género similares no podían ser una opción para él. Antón ha disfrutado tanto o más que su hermana jugando a “papás y mamás”, a “médicos”, a “comiditas”, a las “casitas”… El 99% de sus compañeros de juego son niñas y no puedo describir la emoción que experimentan cada vez que llegan a casa y abren el armario de los juguetes de la hermana de Antón.
Así que, Antón y sus chicas pueden disfrutar de la casita que mis amigas regalaron en su día a su hermana cuando nació. ¡Bendita idea! Puedo asegurar que ha sido un regalo mucho más rentable y explotado que las medallitas de oro, las cuberterías de plata y los faldones con lazos.
Esta última vez, no se conformó sólo con reorganizar el mobiliario, sino que me pidió el móvil para sacarle fotos al resultado.
– Usa la cámara de fotos que mi móvil saca unas fotos muy malas
– No
– Pero, ¿no ves que hay muy poca luz y te va a salir todo muy oscuro?
– Quiero el móvil
– (Mejor no discutir con este cabezota) Hala, aquí tienes… pero luego no te quejes
Media hora después, entro en la habitación y me quedo con la boca abierta. Mi pequeño artista ha encontrado una solución a la falta de luz: ha cogido la lamparita de la mesa y ha estirado el cable todo lo que ha podido hasta colocar el flexo al lado de la casita para iluminarla. En fin que, gracias a su cabezonería, ha descubierto él solito el recurso a los focos (casero en este caso). ¡Tiembla @FelipeAlonsoCom 😉 !
Fotos de Antón en Proyecto Clics: Jugando a las casitas
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