El Cuerpo Humano: aplicación para explicar y entender esta fascinante máquina

aplicación para entender El Cuerpo Humano

Descarga en iTunes App Store

Desarrollador: Tinybop

Idioma: sin audio voz, textos en español, euskera, catalán e inglés (echamos en falta que incluya también gallego 😦 )

Precio: 2,69 €

Categoría: Conocimiento/Cuerpo Humano

Descripción/Valoración: He comprobado que a Antón le cuesta mucho abstraer y necesita visualizar lo que estudia, sean cifras, operaciones aritméticas o los diferentes elementos y funciones del cuerpo humano. Imagino que esta es una necesidad que tienen la mayoría, sino todos los niños, para avanzar en su aprendizaje, pero en el caso de los alumnos con las características de Antón es, sin duda, más acusado. Así que, esta aplicación ha sido genial para nosotros a la hora de estudiar los primeros temas de este trimestre en Conocimiento del Medio relacionados con el Cuerpo Humano.

Estamos estudiando las diferentes funciones (Nutrición, Relación y Reproducción) y los elementos que intervienen en cada una de ellas. Es difícil hacerle comprender qué es y en qué consiste algo que no ve en relación, por ejemplo, al Aparato Respiratorio. Más aún, que pueda entender que introducimos en los pulmones un elemento que se llama oxígeno y que, aunque se encuentre en el exterior y nos rodee, también es invisible a sus ojos. Ni que expulsemos otra especie de entelequia con una denominación imposible: dióxido de carbono.

Es por ello que esta aplicación le ha permitido entender y visualizar toda esta teoría y convertirlo en algo real y casi que palpable. Este vídeo os mostrará cómo, mediante este instrumento, ha conseguido entender a la perfección la función respiratoria y todos los elementos que intervienen en ella.

Seguramente, la evaluación académica no valorará el que Antón entienda este proceso, sino que haya memorizado y sepa escribir correctamente ciertas palabras o expresiones como “dióxido de carbono”, “aparato excretor” o “eliminación de sustancias perjudiciales”. Es una pena que el sistema siga funcionando como funciona…

El resto de posibilidades que incluye esta app resultan igual de fascinantes. Podemos comprender cómo funcionan los diferentes sentidos y entender el papel tan importante que el cerebro desempeña en ellos. Nos permite maximizar la parte correspondiente a la nariz para entender el proceso que interviene en el olfato; seleccionar el ojo y entender cómo visualizamos el mundo a nuestro alrededor, comprobar cómo funcionan sus diferentes elementos con la ayuda de la propia cámara del iPad que proyecta en la parte correspondiente a la retina las imágenes que capta su objetivo, estableciendo así un paralelismo con el funcionamiento del propio ojo humano. En fin, una aplicación fascinante y muy muy recomendable. Con la única desventaja de que no es compatible con el iPad 1, precisamente porque necesita del recurso de la cámara que este primer modelo no incorpora.

Se agradece que, además del castellano, incluya también otras lenguas como catalán o euskera. Es por esto mismo que no entendemos que no incorpore también gallego porque, además de ser de justicia y suponer un agravio comparativo, resulta que este es el idioma en que los niños de Galicia estudian la asignatura. Esperemos que este enorme descuido se corrija en futuras actualizaciones.

De Letras y de Ciencias

Ciencias y LetrasEsta mañana, camino del bus, Antón y yo hemos ido repasando los contenidos del control de Conocimiento del Medio que tenía hoy. Entre ellos, las etapas de la vida: gestación, infancia, adolescencia, madurez y vejez. Pues bien, en las diferentes etapas de mi propia vida, he tenido distintas relaciones con la rama de las ciencias: en la infancia (EGB) odiaba las matemáticas, para pasar a aborrecer las ciencias en general al llegar a la adolescencia (BUP). La causa: una serie encadenada de docentes de estas asignaturas en el instituto que eran tan abominables, como maravillosos aquellos que me impartieron Historia, Literatura o Lengua. Esto, sumado a esa otra abominación de obligar a un alumno a elegir entre ciencias o letras, cuando aún no tiene edad ni criterio para decidir cuestiones mucho más básicas de la vida diaria.

Así que, dadas mis experiencias con los profesores de Ciencias, me decidí por las Letras. Pero no letras a secas, sino letras purísimas. Tanto, que incluían hasta griego. Todo por mantener ecuaciones, derivadas, tablas periódicas, átomos, neutrones y formulaciones lo más alejados de mi persona que fuera posible.

No fue hasta alcanzar la “Madurez”, cuando empecé a ser consciente de lo mucho que, en realidad, me gustan las ciencias. Especialmente la biología. Cuando fui madre y empecé a llevar a mis hijos a ciertos museos relacionados con la ciencia y la tecnología, me encontré como una niña más: parándome a leer cada explicación en paneles y cartelas, a ver todos y cada uno de los vídeos o hacer cola para manipular cada elemento interactivo que encontraba a mi paso. Mamá era siempre la última en salir de la exposición y, tan inmersa estaba en aquel mundo que empezaba a descubrir, con una curiosidad igual de infantil que la de sus propios polluelos, que llegaba a desentenderse de ellos. Menos mal que siempre podían recurrir a su padre, a quien el sistema encaminó y especializó en el sendero contrario: el de las Ciencias.

Como mi intención es evitar que esta experiencia se repita en mis hijos, en nuestra casa nunca se ha hablado de las Humanidades en contraposición a las Ciencias, ni viceversa. Ambas son igual de apasionantes, complementarias y necesarias. Es una pena que nuestro sistema educativo, donde tantas reformas se han sucedido durante los últimos años (a cada cual peor que la anterior), no sea capaz de incorporar esta idea, que es puro sentido común. Seguimos empeñados en especializar y bifurcar el interés por aprender y la curiosidad innata de nuestros niños.

Así que, me encuentro descubriendo, al mismo tiempo que mis hijos, un mundo que por culpa del sistema creía aborrecer. Esta reflexión me ha surgido a raíz del trabajo conjunto que estamos haciendo Antón y yo en las últimas semanas para descubrir juntos todos los entresijos de esa máquina tan fascinante que es el Cuerpo Humano. Por el camino hemos encontrado aplicaciones maravillosas que iremos señalando en las próximas entradas.

El taller del Dr. Panda (La auto-boutique del Dr. Panda)

apps para niños

Enlace descarga en iTunes App Store

Desarrollador: TribePlay

Idioma: sin audio voz

Precio: 1,79 €

Categoría: Ocio/Vehículos

Descripción: Dr. Panda vuelve a acertar con la última aplicación que ha lanzado. No ha defraudado las expectativas de sus fans.

La actividad nos muestra distintos vehículos, diferenciados no por sus marcas, modelos o cilindradas, sino en función de su utilidad, es decir, el aspecto que realmente entusiasman a los niños apasionados de las ruedas como es el caso de mi enano: taxi, coche de policía, ambulancia, autobús escolar, camión de bomberos, etc.

Primero deben pasar por el taller de nuestro polifacético y pluriempleado Dr. Panda para proceder a su revisión. Cada vehículo requiere diferentes labores, tareas o reparaciones: el taxi un buen lavado exterior, el coche-policía repostaje, el autobús escolar una limpieza interior a fondo, para ello cuenta con la ayuda de una aspiradora casi mágica que absorbe incluso bricks o mondas de plátano (¡yo quiero una de esas!). Observación-reflexión de Antón: “en nuestro bus no nos dejan comer…”. Imagino que ahora ya entiende el por qué de esta prohibición.

Además de la tarea concreta que requiere el vehículo, en el taller del Dr. Panda disponemos de diferentes herramientas que permiten tunear y personalizar cada coche: sustituir las ruedas, cambiar su color exterior o adornar el interior con divertidos complementos.

Una vez realizadas las diferentes tareas y reparaciones que requiere cada vehículo, ya están listos para salir a la carretera. Esta aplicación, a diferencia de la inmensa mayoría de apps protagonizadas por vehículos, requiere de una coordinación y destreza mínimas, lo que facilita a los niños con dificultadas motrices la ejecución del juego. Tan sólo requiere que el dedo del niño vaya señalando el camino delante del vehículo. Seguramente, esto tenga mucho que ver con el entusiasmo que ha mostrado Antón por esta app desde el primer día: “Cuánto me gusta, me gusta más que los otros”. Entiéndase por “otros” el resto de aplicaciones del Dr. Panda, lo que ya es mucho decir 🙂

Enlaces a las aplicaciones del Dr. Panda reseñadas en Cappaces:

Dr. Panda Enséñame

El restaurante del Dr. Panda

Salón de belleza del Dr. Panda

El supermercado del Dr. Panda

El jardín del Dr. Panda

La guardería del Dr. Panda

Dr. Panda Hospital: curar a los animales

Especial Dr. Panda

Proyecto Clics (2): El otoño y la muerte

Proyecto ClicsEsta es nuestra segunda (y triste) aportación a Proyecto Clics: El otoño y la muerte

Salimos de casa en dirección al bosque con intención de retratar la nueva estación, el tema propuesto por Proyecto Clics para esta temporada. Camino triste, porque la tristeza se ha apoderado de nuestra familia en los últimos días. Hemos perdido a un ser único y especial a quien no le tocaba marcharse tan pronto.

Antón está confuso y desconcertado. Desgraciadamente, no es la primera vez que ve así a su madre, pero no al tío… Su tío alegre, optimista y divertido. Su tío que le lleva a tomar helados, que le gasta bromas que le divierten y enfadan a partes iguales, con el que graba “harlem-shakes” que nos hacen reír a todos. Su tío es ahora otra persona. Un ser hundido y con el corazón destrozado porque ha perdido a quien era tanto o más que un hermano.

Y aunque intento centrar nuestra conversación en el otoño y en cómo va a reflejarlo en sus fotos, Antón vuelve una y otra vez al tema que ronda en su cabeza durante los últimos días. Me mira y me pregunta:

¿Y por qué inventaron la muerte?

No lo sé, cariño… A lo mejor porque sino no cabríamos todos en el mundo

Pero si hay muchos países…

¿y?… no entiendo

Pues que caben todos

–    ……..

Cuando se mueren todas las personas, ¿nacemos otra vez?

Lo miro atónita. Mi hijo de 8 años, educado en el agnosticismo y a quien nunca se le ha hablado de «cielos» ni “paraísos» para explicar y dar sentido a la desaparición de seres a los que queremos, acaba de formular lo más parecido a la teoría de la reencarnación. Por puro instinto. Porque le resulta difícil aceptar la idea de que simplemente dejemos de existir. ¿Cómo entender y aceptar algo así? ¿Cómo comprender la «no existencia»? ¿y cómo tolerar lo intolerable de no volver a ver a personas tan importantes en nuestras vidas?…

Seguramente, en parte porque en nuestra cultura rehuimos el tema de la muerte, porque evitamos enfrentar a nuestros niños a estas situaciones creyendo ahorrarles así sufrimiento cuando, en realidad, lo que quizás deberíamos hacer sería encarar con ellos una certeza que afecta a nuestras vidas y con la que todos nos vamos a encontrar algún día. Prepararles, cada uno desde sus creencias y sus convicciones, pero con determinación y sin miedo, si es que esto es posible…

Así que, nos olvidamos del bosque y sus hojas, y reconducimos nuestros pasos hacia el cementerio. Al fin y al cabo, pienso, el otoño no deja de ser un poco la estación de la muerte. Quizás porque es en estas fechas cuando la naturaleza empieza a morir para volver a renacer con fuerza en primavera (en la naturaleza sí existe realmente la reencarnación). Y tampoco puede ser casualidad que sea en otoño cuando rindamos homenaje a nuestros muertos, por mucho que en los últimos años nos hayamos empeñado en disfrazar esa fecha con tradiciones importadas.

Hasta siempre, Iván.

Ojalá nunca nunca hubieras sido el protagonista de esta conversación ni la inspiración de esta entrada…

Instrumentos que permiten innovar y motivar mediante la utilización de las TICs

Introducir tecnología en las aulas  no puede consistir tan sólo en sustituir libros por portátiles o cuadernos por tabletas. La utilización de estas herramientas de información y comunicación debe impulsar también una transformación de la metodología y de la forma de alcanzar diferentes objetivos pedagógicos y académicos.

El libro de texto digital no puede limitarse a reproducir la dinámica del libro en papel sobre un formato digital. Es más, quizás debiéramos plantearnos su eliminación o, al menos, promover que se utilice en menor medida. Los libros no pueden seguir siendo la columna vertebral de la enseñanza. Ese papel corresponde al docente que ve minada su libertad, imaginación y vocación por la dictadura que implica la rigidez de temarios y libros de texto.

Deberíamos aprovechar esa multitud de herramientas que se encierran en una tableta: diccionarios, enciclopedias, mapas, cámara de foto y vídeo, grabadora, editor de textos y presentaciones, aplicaciones que permiten componer collages, cómics, libros… Las posibilidades son infinitas,  así que no deberíamos limitar su uso al acto de abrir un libro digital por tal página o utilizar determinada aplicación para reforzar la ortografía, las tablas de multiplicar o los conocimientos de anatomía.

Hace unos meses mi hija me pidió que le ayudara a crear su propio blog. Es una lectora voraz y quería compartir los libros con los que más había disfrutado y que más le habían conmovido. Así nació Ler para dentro. La administración de este espacio y todo lo que implica, quizás le haya restado tiempo para hacer deberes y estudiar, pero lo que ha ganado a cambio es impagable.

Educacion y TICs

lerparadentro.com

No sólo ha sido un incentivo más a su pasión por la lectura, sino que le ha dado la oportunidad de aprender de multitud de temas y sobre la utilización de diferentes herramientas a través de la práctica:

  • Elección del nombre del blog
  • Diseño, contenido y estructura del blog
  • Definición de categorías y etiquetas
  • Manejo de documentación e información (sobre las obras, enlaces a biografías y webs oficiales de los autores)
  • Búsqueda, selección y descarga de imágenes
  • Creación de imágenes propias (manejo de la cámara, de aplicaciones de fotografía, edición de imágenes, etc.)
  • Redacción y revisión de textos, cuidado de la ortografía, edición de textos, práctica de la mecanografía…
  • Aprender los entresijos de la informática más allá del “abrir” y “aceptar”
  • Interacción con sus lectores a través de comentarios, correos y mensajes. Una forma de aprender a relacionarse en la galaxia virtual que les ayudará después a saber cómo moverse por las redes sociales

Educacion y TICs

Con el tiempo, además, no sólo ha dado cabida en el blog a sus lecturas preferidas, sino que también ha explorado otras vías de creación, incluyendo textos propios y aprovechando este espacio como excusa para cultivar y compartir otra de sus pasiones como es la fotografía. Su último proyecto es la publicación de algunos de los cuentos que ha escrito. Está colaborando con un compañero de clase, que es un genio del dibujo, para ilustrarlos. ¿Qué mejor manera de cultivar la creación artística y fomentar el trabajo en equipo?

Con todo lo descrito, ¿cómo no se va a aburrir con los ejercicios de corta y pega manual que significan las actividades de los libros de texto? Es más, me parece un milagro que no se haya rebelado y negado en redondo a dedicar tiempo a estas tareas. Lo acata y hace los deberes de turno sin ganas y con resignación, lo que me plantea enormes dudas acerca de su utilidad y sobre si es realmente una forma eficaz de alcanzar un aprendizaje y asimilar conocimiento. Resulta extraordinariamente aburrido y poco motivador hacer las cosas sin sentido y sin un objetivo claro. Sobre todo si se tiene 12 años y se está rodeada de infinidad de actividades e instrumentos fascinantes y sugerentes.

Saquemos provecho de las tabletas y de las pizarras digitales. Las posibilidades seguramente sean infinitas. Se podría utilizar en el aprendizaje de conocimiento del medio, animando a los alumnos a salir con sus cámaras a retratar la flora de su entorno, buscar información en internet y elaborar una presentación particular sobre el tema. Lo mismo con el patrimonio arquitectónico, etnográfico o cultural del lugar en el que viven. Existen aplicaciones que permiten la creación de collages y composiciones, cuentos ilustrados, cómics y hasta revistas.

Estos dispositivos resultan también herramientas increíbles en cuanto a la enseñanza de lenguas extranjeras. Recuerdo cuando en mi época de EGB nuestra innovadora maestra de inglés nos inscribió en un programa para cartearnos con niños anglosajones. Resultó una experiencia increíble que, sin embargo, requería de enormes dosis de paciencia dado lo prolongado del tiempo que transcurría entre el envío de una misiva y la contestación de mi pen-friend de Cardiff. El correo electrónico y las plataformas de mensajería instantánea posibilitan una inmediatez que constituye el más poderos de los estímulos. Nada mejor para incentivar el aprendizaje de otro idioma que la utilización del instrumento que le da sentido: la comunicación. Y no son pocas las iniciativas que existen en la red que propician el encuentro y la comunicación entre alumnos de diferentes países.

Todo esto no supone más que una pequeña parte de la infinidad de actividades que permiten las TICs. Son, además, actividades dinámicas que convierten el acto de aprender en algo lúdico, emocionante y activo. La letra no entra con sangre, así solo se alcanza el desinterés, la alienación y el aborregamiento. Y nosotros deberíamos aspirar a formar niños despiertos, creativos y, sobre todo, felices.

Enlaces relacionados:

Aplicación de las nuevas tecnologías a la Educación

Enseñar dónde, cómo y con quién