Crónica de Menorca (por Antón Fontao)

El fin de semana pasado fueron las jornadas “Balears per la inclusió”, donde se proyectó el documental y hubo varias charlas.

En el documental, con su posterior coloquio, como siempre, se abrió una mesa redonda y hablamos Alejandro, Nacho y yo. Me gustó mucho estar con ellos dos, y a mí me costó creer que estuviera allí. Había mucha gente. De hecho, cuando llegamos (ya con el documental empezado), el auditorio estaba a oscuras pero aún así se veían bastantes personas. Hablamos largo y tendido, y yo creo que los tres nos compenetramos muy bien; Alejandro desde el punto jurídico, Nacho como profesional que está dentro, y yo como alumno que ha sufrido en la escuela. Además, me gustó mucho que hubiese tanta participación entre el público. Aunque era gracioso porque yo desde el escenario con los focos no veía quién hablaba.

Composición con tres fotografías de la mesa redonda a la que se alude en el texto. En las imágenes aparecen los tres ponentes mecionados. De fondo, la proyección del cartel de las jornadas donde destaca un faro.

Después estuvimos un buen rato por allí, algunos en el mismo auditorio y otros fuera, y yo en cuanto pude me fui fuera porque hacía mucho calor. Y digo que me fui en cuanto pude, porque me felicitó bastante gente y me pidieron fotos (a mí me dio bastante corte, la verdad, pero me gustó que apreciaran mi trabajo). En cuanto pude salir agradecí mucho el viento soplándome y allí estuve hablando con varias personas. En un momento dado Fátima, Lucía (adulta) y yo hablamos de la buena labor que hizo Cecilia, y Fátima nos contó que le había gustado mucho trabajar con ella. La verdad es que Fátima tiene muy buena conversación, ella y yo hablamos bastante cuando nos vemos.

Luego fuimos andando hasta un sitio donde íbamos a celebrar la jubilación de María José, una orientadora que ya se retiraba y que hizo mucho bueno.

Nuestro grupo llegamos al lugar los primeros, y los otros venían llegando. Malena agarraba el ramo de flores y Darío y yo la banda. Cuando llegó María José, se notó que eso era lo último que se esperaba y estuvo a punto de llorar.

Composición con tres imágenes de la fiesta de jubiliación de María José que captan el momento en que los chicos y chicas reciben a María José y le entregan un ramo de flores.

Después nos sentamos a comer, entonces Malena y yo estuvimos hablando durante mucho tiempo poniéndonos al día. Había dos nuevas personas en la mesa: Adriana, la hija de Susana y Fidel, que me pareció muy riquiña (tranquilos para los de fuera de Galicia, que es algo bueno, es como un ser muy tierno), y Vicent, otra persona que me caía mejor y mejor según lo iba conociendo.

Al terminar de cenar Viki, David y Raúl se levantaron a hablar con un micrófono que nos dieron. Entonces Viki entre tantas cosas bonitas, dijo algo con lo que estoy muy de acuerdo, que esta fiesta de jubilación fue mejor que si la hubiese celebrado con sus compañeros, y esto lo digo yo, que lo único que le trajeron fueron cosas negativas, como a todos los que trabajan en los centros educativos que quieren hacer las cosas como hay que hacerlas.

Sujetados con unas pinzas había unos plastificados con fotos de María José y mensajes hacia ella.

Un rato más tarde, seguimos de sobremesa y había música, no estaba muy alta, pero en un momento dado vino la policía porque un vecino la había llamado porque según él teníamos la música muy alta. Yo respeto que se quisiera ir a dormir, pero hombre, que no pretenda un viernes por la noche hacer como si fuese un día cualquiera entre semana.

Una vez terminada la fiesta decidimos irnos cada uno para la respectiva casa que nos había tocado, y llamamos a varios taxis, pero hubo uno que no nos quería llevar porque por lo visto no conocía ese sitio. A ver, nuestra casa estaba un poco apartada hacia el monte, pero yo pienso que ese es su trabajo y que lo hubiese buscado en el Google Maps.

Cuando llegamos a nuestra casa (suerte que estaba en Mahón, porque al otro grupo les había tocado en otra que estaba en Ciudadela, en la otra punta de la isla, a 45 minutos más o menos de Mahón), me pareció bastante chula, aunque eso lo pensé a la mañana siguiente, porque en ese momento era de noche.

Foto con todas las personas que se alojaron en la casa a la que se alude en el texto, posando frente a la entrada de la casa.

Luego, en una habitación en la que eran todas literas, algunos no estaban y otros ya estábamos en nuestras respectivas camas hablando un poco. Cuando Malena quiso bajarse de la litera, se quedó con las piernas suspendidas en el aire; mientras ella pedía ayuda, yo me estaba descojonando de la risa, hasta que mi madre la ayudó.

A la mañana siguiente, supongo que muchos hubiésemos agradecido dormir más tiempo, pero una furgoneta quedó en venir a recogernos a las 8, así que no nos quedó más remedio, y sobre todo si tenías que hacer cola en el baño. A mí me costó un poco subirme a la furgoneta, y Malena si se hubiese reído no hubiese pasado nada, así me la devolvía.

Al llegar me pareció bastante raro no ver a gente, estaba un sitio abierto que fue al que fuimos a desayunar, y digamos que la mujer que atendía era un poco peculiar. Me encantó la compañía y de lo que hablamos.

Pasado un tiempo, nos teníamos que ir al lugar en donde eran las jornadas. El sitio era donde hacían los plenos del Ayuntamiento y era muy chulo y muy espacioso. Empezó hablando la misma que el día anterior había dirigido el debate, siguiendo las palabras de otras personas, hasta que llegó la ponencia de Silvana que a mí me gustó mucho. A todo esto, yo no la conocía personalmente y me cayó muy bien.

Composición con dos fotografías donde aparece el autor del texto junto a Silvana Corso.

Quería comentar un vídeo que puso que me encantó y era bastante gracioso. Este trataba de un hombre que iba por distintos sitios y lo infantilizaban; por ejemplo, cuando iba a preguntar por una calle el otro le explicaba hablando muy alto, o en una tienda de ropa que en vez de hablarle la dependienta a él le hablaba a la acompañante, que me sentí muy identificado en esa escena. Es tan necesario explicarlo y a la vez tan absurdo…

Después llegó la ponencia de Joan Jordi Montaner que yo no lo conocía, y me gustó mucho, además lo hizo mezclando el humor, y muy bien. Lo que pasó es que acabando su charla, criticó al Conseller de Educación (en mi opinión me gustó mucho que hablara sin pelos en la lengua. Claro que sí, llamemos a las cosas por su nombre. Al pan, pan, y al vino, vino), allí había una de la Consellería e intervino bruscamente, diciendo que no le había gustado eso que dijo, vamos, que se lo tomó como un ataque.

Imagen de Joan Jordi Muntaner durante la conferencia a la que se alude en el texto.

Por la tarde eran los grupos de trabajo, pero antes de comer nos dieron tiempo para que cada uno propusiera sus ideas, entonces en nuestro grupo siguió un poco más el debate por lo que había dicho la mujer. Me gustó mucho cómo habló Viki, y acto seguido la de la Consellería le dijo que estaba allí para oír y escuchar.

Después, cuando íbamos a comer, Lucía (adolescente), Luz, Tere y yo, que era los que estábamos en ese grupo de debate dijimos que la de la Consellería por la tarde no iba a volver. Y así fue.

De la sesión de la tarde me gustó lo que dijeron Alejandro, Malena, Darío, Lucía, Luz y Tere; también me gustaron varias personas más, pero no sabía quiénes eran.

Luego, como el año pasado en Madrid, nos juntamos otra vez todos los grupos y salió un representante por cada grupo a hablar. Fue gracioso porque a Raúl a ratos no le funcionaba el micrófono.

Al acabar estuvimos un rato hablando en el recinto, y luego fuimos a un sitio que me pareció muy bonito. Antes de la comida (que eran una serie de pinchos como en los que dan en las bodas antes de sentarse a comer, que a mí en general me gustaron, pero me pareció poca cantidad) estuve sentado en la mesa tomando algo con Lucía (adolescente), Carmen M., con Imma, con Auri y con otra persona que no conocía.

En la cena, al aire libre, hacía bastante frío aunque se aguantaba con una chaqueta, me senté con Alejandro, Lucía (adulta), Malena y con mi madre. Fue un gusto tener a Chicote al lado como crítica gastronómica (lo digo por Lucía, jajaja).

Acto seguido fue un momento muy esperado por mí: “LA NOCHE DISCO”. Donde era, era en un sitio espectacular.

Composición formada por tres fotografías donde el autor posa con diferentes personas asistentes a las jornadas

Fue indescriptible lo que ocurrió durante todo ese tiempo.

Yo al principio estaba bailando pero no como bailo yo con naturalidad, estaba un poco tímido, pero cuando sonó “Viva la vida” de Coldplay (canción pedida por mí) y llegó Malena, bailamos mogollón toda la noche. Bailé con muchas personas.

Yo destacaría cuando sonó “Ay Mamá” de Rigoberta Bandini, que todos hicimos ese baile de andar con mucho flow.

Pero es que la guinda del pastel fue cuando sonó de última, en mi opinión a eso se le llama acabar por todo lo alto, que quedábamos los suficientes, sonó “No dudaría” de Antonio Flores, y el momento fue precioso: hicimos un pequeño círculo agarrándonos la cintura con las manos, bailando y cantando (el vídeo lo tenéis con todas las fotos acompañando a este escrito). Ese momento fue muy emotivo. Yo pienso que esa letra tiene relación con esto por lo que estamos luchando: “prometo ver la alegría y escarmentar de la experiencia, pero nunca más usar la violencia”.

El autor del texto posando en un momento de la fiesta con una chica y dos chicas adolescentes asistentes a la fiesta que menciona en los párrafos anteriores.

Llegó el domingo y fuimos a una feria de quesos que había en Mahón. Los que estábamos en ese momento estábamos viendo un poco el ambiente, entonces Nuria decidió ir por algunos puestos, y a mí me revienta dejar a alguien solo (por propia experiencia) y fui con ella. De la tanta hambre que tenía, cogí un palo de pan y lo unté con un queso que estaba fuerte. Se me mezcló el gusto por comer y el sabor del queso que no me gustó.

Para comer fue muy gracioso porque, o no había sitio para todos o no había comida en ningún restaurante, así que pedimos unas pizzas del “Telepizza” y las comimos en una plaza (yo nunca pedí en mitad de una plaza, incluso me tuve que ir porque me dio un ataque de risa, y es que porque Nacho estaba pidiendo, y a mí me pareció una situación extraña y muy graciosa: pidiendo pizzas en una plaza).

Al llegar las pizzas, como no venían cortadas, Malena fue al bar más cercano a pedir un cuchillo. Le dieron unas tijeras todas sucias, y entonces Nacho fue por las mesas de la terraza pidiendo un cuchillo a los clientes, hasta que vino con uno y pudimos cortar las pizzas y comerlas.

En cuanto a la gente, a algunos ya los conocía, y tanto, y la verdad, ¿cómo es posible que haya este tipo de gente, tan maja y tan buena? Y respecto al resto que no conocía, un poco más de lo mismo.

Quiero hacer unas menciones especiales.

Muchas gracias a Mónica Llera por organizarlo todo hasta el último día antes de ir. ¡Qué currazo!

Muchas gracias a David Gándara por ese dibujo que nos hizo a Alejandro, a Nacho y a mí durante la mesa redonda del viernes (hasta me dibujó con el párpado caído, cuidando hasta el último detalle), y por el otro dibujo que recreó a través de una foto que nos sacamos en Chicago. ¡Qué genio!

Composición donde aparecen dos imágenes de los dibujos de David González Gándara a los que se alude en el párrafo anterior.

Muchas gracias a Paula por esas fotos tan chulas que sacó, en especial a una que nos hizo a mi madre y a mí (la podréis ver en las fotos que están acompañando al texto)

Foto realizada por Paula Verde donde aparecn Antón y Carmen abrazándose

La verdad es que ese fin de semana me lo pasé muy bien y fue muy bonito.

Hasta el año que viene, mientras seguimos por nuestra cuenta yendo a sitios a hablar sobre inclusión, y que siga proyectándose el documental en muchos más lugares.

¡Seguimos!

¡Radikalicémonos! (nuevo grito de guerra creado por mí)

Students for Inclusion – AERA 2023

El grupo de Estudiantes por la Inclusión (EXI) acaba de participar en el congreso de investigación educativa más importante del mundo, tras haber obtenido el Premio «Youth Teams in Education Research” (YTER), otorgado por la American Educational Research Association (AERA). Este año, el congreso se ha celebrado en Chicago.

El trabajo premiado es una Investigación Acción Participativa Juvenil que ha desarrollado este grupo durante los dos últimos años. Entre las tareas que han llevado a cabo destacan la publicación de la Guía «Cómo hacer inclusiva tu escuela”, una gran labor de divulgación en prensa, radio y televisión, el desarrollo de formaciones para docentes, participación en congresos, manifestaciones, protagonizar un documental, incidencia política, etc.

Es difícil explicar lo que hemos sentido durante este encuentro en Chicago. Este vídeo muestra sólo una parte de esas vivencias y emociones. Ojalá sirva también para contagiar a cualquiera que no debemos que conformarnos con lo que hay. Y para seguir adelante en la conquista de las escuelas como sitios de esperanza.

 

 

LA TRIBU: del dolor individual a la construcción colectiva

LA TRIBU

La escolarización de Antón fue un camino lleno de dolor —porque golpea a lo que más queremos en la vida— donde nos fuimos encontrando muchas familias. Y nos encontramos gracias a ese espacio tan denostado que son las redes sociales. Para nosotros han ido mucho más allá de compartir fotos de comidas, fiestas o vacaciones. A muchos nos han servido para encontrarnos, elaborar argumentos, idear herramientas y aprender a disentir juntos en la defensa de los derechos de nuestros hijos e hijas, a quienes no sólo se cuestiona su presencia en la escuela, sino incluso su humanidad.

A lo largo de estos años, hemos ido tejiendo redes que nos han proporcionado, sobre todo, fuerza para resistir en esta lucha, porque las embestidas del sistema son casi diarias y cada vez se hace más dura. Redes que, con el tiempo, han llevado a iniciar transformaciones reales.

DES-AHOGO

Hace cuatro años, viví un momento emocional de especial dolor y fragilidad. Mi hijo iniciaba su segundo curso en el instituto y yo quería tirar la toalla porque ya no podía más. La Primaria había sido una etapa con momentos muy dolorosos, pero la Secundaria se había revelado como directamente el infierno. Y a comienzos de ese segundo curso, me vi ya sin fuerzas. Necesitaba compartirlo, pero no podía hacerlo abiertamente en redes como con otros momentos puntuales que había vivido en este camino.

Así que el 18 de octubre de 2018 creé un grupo de messenger con las personas con quienes me sentía más cómoda, o más identificada, o que pensaba que mejor me iban a entender. Messenger me pedía un nombre para el grupo y le llamé DES-AHOGO Porque así es cómo me sentía. Sentía que me ahogaba, no sólo emocional sino casi físicamente. Y necesitaba compartir cómo me sentía con gente que sabía que entendería por lo que estaba pasando. Contarles que ya no me veía capaz de seguir resistiendo más. Que nos íbamos a ese lugar creado para el alumnado que la escuela expulsa, a veces directamente y otras, como en nuestro caso, de forma indirecta.

Pero al otro lado no me encontré con los mensajes que había esperado. Eran mensajes de comprensión y de apoyo, sí, pero que me hicieron ver que no podía rendirme. Fueron muchas las palabras, los argumentos y las razones pero, sobre todo, la fuerza que me llegó y que consiguió que no me rindiera.

Ese grupo se convirtió en un lugar de desahogo para todas las personas que formábamos parte de él. Y con el tiempo, se transformó en un espacio donde siempre había alguien con alguna palabra, sentimiento, idea o recurso que unas veces ofrecía soluciones para los problemas que se planteaban y otras los hacía más llevaderos.

Con el tiempo se fue sumando más gente. No sólo familias, sino también profesionales que sufrían en la escuela por culpa de la vulneración de derechos que veían sufrir a su alumnado. Personas con más ideas, y más fuerza, y más recursos… 

Un día, una compañera dijo que éramos unos Radikales desadaptados y así fue como cambió el nombre del grupo a otro más acorde con aquello en lo que se había transformado: porque se convirtió en un lugar de resistencia y disidencia colectiva, un espacio que nos daba fuerza a todos para afrontar el día a día y las embestidas de la escuela, de quienes no querían allí a nuestros hijos e hijas e interpretaban su presencia como una especie de capricho o excentricidad de sus familias y no como un derecho.

 

CONVERSACIONES SOBRE LA ESCUELA INCLUSIVA

Y entonces llegó aquel encierro en marzo de 2020, por culpa de un virus que puso el mundo patas arriba, pero que, paradójicamente, a nuestros hijos e hijas les permitió ser más felices al alejarlos de la escuela y a nosotras, sus familias, nos permitió disponer de más tiempo para seguir pensando y armando transformaciones.

Las reuniones más intensas del grupo surgieron de forma espontánea en ese momento en que disponíamos de todo el tiempo del mundo. Dispusimos de tiempo en cantidad y en calidad, y eso nos permitió consolidarnos como grupo. Además, se sumaron otras personas a aquellos encuentros virtuales: familias, profesionales y por fin también, el alumnado, esa parte de la escuela a quien nunca se escuchaba. Fue así como se creó una resistencia paralela formada por nuestros hijos e hijas y los hijos e hijas de muchas otras personas que tenían en común el dolor que les generaba la escuela.

 

QUERERLA ES CREARLA

De esta forma que estoy resumiendo tantísimo nació el movimiento Quererla es Crearla y lo que podríamos llamar “sus juventudes”, agrupadas bajo el nombre de Estudiantes por la Inclusión (EXI).

Quererla es crearla es una red de personas comprometidas con la transformación del sistema educativo y de la sociedad, para que no deje fuera a nadie. Es un movimiento conformado por familias, docentes, estudiantes e investigadores, que quiere reunir todos esos esfuerzos que están haciendo distintas personas de forma individual, para conseguir la transformación de la escuela desde lo colectivo.

Quererla es crearla reúne a gente con la necesidad de crear algo que no existe y que es la educación inclusiva. Porque la realidad nos demuestra que la escuela inclusiva no existe. Una escuela que casi cada día excluye y expulsa, no puede denominarse inclusiva. Y si la queremos, tenemos que crearla. De ahí su nombre, que es una declaración de principios: Quererla es crearla. Cualquier persona que se identifique con este ideario, puede sumarse a este colectivo y a este movimiento.

Quererla es crearla busca una transformación social y cultural que debe nacer en la escuela. Y eso empieza por dejar de naturalizar que el sistema y quienes trabajan en él consideren que hay niños y niñas que no encajan en la escuela común, porque es tanto como decir que no encajan en el mundo. Y eso de ninguna manera debería asumirse ni aceptarse.

Quererla es crearla no es una asociación, ni una organización. No tiene organigrama, ni estatutos, ni presta servicios. QEC sí cuenta con un manifiesto, que es una declaración de intenciones y que anima a unirse a cualquiera que esté de acuerdo con él. Podéis leerlo aquí y sumaros al colectivo si os sentís identificados con lo que en él se expone.

 

Hace un par de meses me invitaron a participar en el ciclo “Re-generemos ciudad viva”, organizado por ECOM, para poder explicar qué era este colectivo y este movimiento. Así que si no tenéis muchas ganas de leer este post, podéis escuchar mi intervención en el vídeo que incluyo.

Os invito también a conocer todo este trabajo y este proceso más a fondo y a uniros a él, si es que conseguido transmitiros siquiera un poquito de la emoción que todos los que formamos ya parte de este colectivo y de este movimiento sentimos. Porque ser conscientes de que nos acompaña la ley y la humanidad, la razón y el corazón, nos ayuda a salir al mundo cada día para transformarlo y hacerlo más acogedor para todas las personas, independientemente de sus características y circunstancias. 

Los muros caerán

Hace unos días Antón y yo fuimos invitados a participar en las “IV Jornadas de infancia y adolescencia. Aproximaciones para transformar y crecer desde la Terapia Ocupacional”, organizadas por la Facultade de Ciencias da Saúde de la Universidade da Coruña.

Fue una oportunidad bonita y emocionante que disfrutamos mucho. Nos sentimos escuchados por los alumnos del grado de Terapia Ocupacional y tenemos esperanza de que nuestras voces sirvieran para que ejerzan su profesión de forma humana: escuchando a las familias y ayudando a transformar el entorno en lugar de intentar cambiar a los niños y las niñas.

Nos sentimos también muy afortunados por las amigas que vinieron a arroparnos. Entre ellas estaba Daniela, la profesora de Infantil de Antón. La persona que nos regaló los años más bonitos de nuestra vida.

Dispusimos de una hora que, aunque alargamos un poco, resultó insuficiente para trasladar las experiencias de diecisiete años. Así que apenas pudimos dedicarle tres minutos a la etapa de Educación Infantil. Un minuto por curso. Aunque hubiéramos dispuesto de cinco horas, habrían resultado insuficientes para describir todo lo que vivimos durante aquellos tres años. Completamente imposible. Así que he querido compartir hoy este vídeo para recordar aquella etapa tan bonita. Tampoco consigue trasladar todos los procesos y vivencias que tuvimos la suerte de experimentar, pero creo que sirve para hacerse una idea de aquel tiempo.

Un tiempo donde pensamos que era posible que los muros cedieran (como dice la canción de Style Council que acompaña al vídeo). Los muros de la exclusión, del rechazo, de la invisibilidad. Los muros que se tambalearon con Daniela.

Me duele esa oportunidad perdida. Porque si lo que ella plantó hubiera tenido continuidad en los años siguientes, habrían acabado derrumbándose.

No pierdo la esperanza porque Daniela sigue sembrando. Y eso es lo que realmente cambiará el mundo: plantar a nuestro alrededor y conseguir crear una nueva generación lo suficientemente firme y sólida para que se convierta en especie invasora que penetre y derrumbe todos los muros.

Lo que significaron los EXI para mí (por Antón Fontao)

El pasado 19 de marzo, Antón y yo participamos en el Congreso de inclusión y buenas prácticas en la educación celebrado en Cádiz. Unas jornadas donde profesionales, familias y alumnado nos reunimos para hablar de Educación y Derechos. Del derecho a la educación de todas las personas.

Antón participó junto a varios de sus compañeros y compañeras del grupo “Estudiantes por la Inclusión” (los EXI, como se hacen llamar) en una mesa donde hablaron de la guía “Cómo hacer inclusiva tu escuela”. Un proyecto que les ha sido encargado desde el INTEF (Instituto Nacional de Tecnologías Educativas y de Formación del Profesorado) y donde han trabajado junto a Luz Mojtar y Nacho Calderón, profesores en el Departamento de Teoría e Historia de la Educación y M.I.D.E. de la Universidad de Málaga (UMA).

Quiero agradecer a las fantásticas mujeres de FEDAPA Cádiz que hayan propiciado este encuentro porque, como tan bien como expresa Nacho, pocas veces se ve una una propuesta de formación tan interesante como esta: además de contar con la participación de profesionales e investigadores/as, hay un espacio destacado para un grupo de familias promotoras de la educación inclusiva y el grupo Estudiantes por la inclusión, que van invitados por la organización con todos los honores, porque reconocen en sus saberes algo que otros colectivos nunca podremos ofrecer.

Las asociaciones de madres y padres, pero también los centros de formación del profesorado tienen en este evento un buen ejemplo que emular. Hay todo un desarrollo por explorar para promover la educación inclusiva a través de la escucha real y profunda de las voces de toda la comunidad escolar, y particularmente las de los y las estudiantes. Quiero felicitar a las organizadoras por su apertura y su disposición a generar nuevas propuestas formativas. Y también quiero felicitar a [nombre], Antón Fontao, Zulaika Hadmed, Indira Martínez y [nombre] por el trabajo realizado, y porque sus deseos de cambio son poderosos, subversivos e ilusionantes.

Cartel del Congreso Inclusión y buenas prácticas en la educación

Al final de su intervención, Antón quiso leer un texto que había preparado para trasladar y agradecer públicamente a sus compañeras y compañeros de los EXI todo lo que habían significado para él. Quiero compartirlo hoy por aquí con su autorización.

Para mí los EXI me llegaron en un momento de mi vida que lo estaba pasando bastante mal por culpa del instituto.

A mí siempre me cuesta abrirme a la gente, algunas veces más y otras menos, pero la primera vez que nos reunimos eso no pasó. Con ellos me abrí en cuerpo y alma. Con ellos no había cosas que no les contara, porque se lo contaba todo, y es que en ningún momento me daba vergüenza decirles algunas cosas.

Para mí los EXI me llenaron de felicidad. Con ellos fui yo mismo. Es como que todos tenemos nuestras malas experiencias en la escuela y que con todas ellas juntas, sabiendo que no solo fuiste tú quién sufrió, como que nos unió de alguna forma u otra y también como que nos hacemos más fuertes.

Me llevo unos amigos y compañeros de lucha increíbles. Porque ojalá que esto sólo sea el comienzo de una larga lucha todos juntos. Y de amistad también.

No podía haberlos mejores. Os quiero.

– Antón       

Comparto también el vídeo de la maravillosa mesa redonda de los EXI.

Son sólo 40 minutos y os aseguro que van a ser de los mejor invertidos de vuestra vida.

Escuchadles 🙏🏽

No estamos solas

Diversidad 2.0 copia

El pasado 20 de junio celebramos en Madrid las jornadas “Diversidad 2.0: propuestas creativas, tecnologías e inclusión” donde seis compañeras de blogosfera nos reunimos con otras compañeras de hermandad para compartir un día tan intenso como emotivo.

Las seis madres que expusimos en aquella mesa nuestros proyectos, tenemos en común que la diversidad de nuestros hijos nos ha llevado a explorar distintos caminos: escritura, fotografía, poesía, música, creación audiovisual… Caminos distintos pero con un mismo objetivo: explorar el mundo interior de nuestros niños, fundirnos con ellos e intentar trasladar nuestra mirada (la mirada conjunta que surge de esa simbiosis) al mundo exterior, para que aprendan a entenderlos, respetarlos y quererlos como nosotras. O, al menos, lo más parecido posible.

Tuvimos la oportunidad de exponer por separado nuestros respectivos proyectos y también compartimos una mesa redonda que nos agrupó bajo el título de “Propuestas Creativas” y estaba centrada en las diferentes formas en que las seis personas allí sentadas (aunque fuera seamos cientos, miles, más) habíamos escogido para cambiar la mirada de la diversidad.

Yo he escogido la palabra escrita como arma de destrucción masiva. De destrucción de la mirada que se ha venido proyectando hasta ahora sobre la discapacidad. Y Cappaces es el vehículo que utilizo para lanzar esos mensajes al mundo y ver si, a base de bombardear y ser insistente, aunque sea siquiera por cansancio, ese mundo exterior acaba escuchándonos.

Porque escuchar es el paso previo a la reflexión y después de la reflexión vendrá el cambio en la actitud, si es que llega.

Así que Cappaces es, en realidad, o quiere serlo, un arma de construcción masiva de una nueva sensibilidad. Una nueva sensibilidad que aparque la exclusión y el rechazo, pero también la pena, y que construya la inclusión sobre el respeto, la normalización y la igualdad de derechos.

Imagen de Paula Verde Francisco©

Imagen de Paula Verde Francisco©

Unos días antes de las jornadas, las seis madres diversas que organizamos el encuentro (bajo la batuta de Rosa Aparicio), hablábamos (o, más bien, chateábamos/escribíamos que es nuestra forma habitual de comunicación y aunque haya quien aún no lo crea, también tiene mucha “piel”) y hacíamos una puesta en común del objetivo de las jornadas. Entonces pensé que unos de esos objetivos era darnos apoyo emocional, crear vínculos y estrechar nuestra conexión.

Y me vino a la cabeza ese marido mío, Misanto, que milita en la lucha política desde los 18 años (hace unos meses cumplió medio siglo, así que ya se puede decir que son años). Pues bien, cada campaña electoral (como nos desaparece de casa) se repite lo mismo: yo le cuestiono el sentido de los mítines y le digo que pierden tiempo y energías organizándolos porque no sirven para conseguir votos, que sólo van los que ya están convencidos.

Y él siempre me contesta lo mismo: que los mítines no son para lograr votos, sino para insuflar ánimos a la militancia, para que la emoción que se acaba creando en medio de ese ambiente se transforme en energía. Una energía que les lleve a salir a la calle fuertes y convencidos y poder así transmitir ese entusiasmo fuera, al resto del mundo.

Pues bien, para mí, los encuentros como el que realizamos en Madrid (al igual que el que organizó Aspau en Valencia en mayo), tienen una función similar: puede que aprendamos nuevas herramientas para poner en práctica con nuestros niños, o no; puede que aprendamos ideas nuevas sobre la diversidad, o no… Pero, para lo que sí sirven, de eso estoy completamente segura, es para darnos apoyo emocional, estrechar y afianzar esos vínculos que a veces se inician por la esfera virutal y llenar el tanque de nuestra autoestima y nuestra convicción de que la lucha por los derechos de nuestros niños es justa, es importante, es necesaria y, sobre todo, de que aunque en nuestra vida diaria a veces lo parezca, NO ESTAMOS SOLAS.

Diversidad 2.0

 

Estos son los proyectos de mis compañeras diversas:

Rosa Aparicio: iPads y Autismo

Belén Jurado: La habitación de Lucía

Olga Lalín: Alto alto como una montaña

Rocío Sotillos: La tribu de los superpapás / Disfraz y vitamina

Paula Verde Francisco: Mi mirada te hace grande

 

Millones de gracias también a Inma Cardona (Miguel, autismo y lenguaje) que ha convertido el sexteto en septeto 😊

Cappaces en Hoy por Hoy (Cadena SER)

audio de la entrevista en Hoy por Hoy (Cadena SER)

audio de la entrevista

Quiero agradecer a Carles Peña la oportunidad de difundir y dar voz a nuestro proyecto en la sección  «SER Capaces» de la que es responsable y que, cada viernes, centra su atención en el mundo de la diversidad funcional dentro del programa «Hoy por Hoy» (Cadena SER)

Millones de gracias también y un abrazo inmenso a Cristina Navarro que fue quien contactó con ellos inicialmente y les habló de cappaces.com

AUDIO de la entrevista

Red de Buenas PráTICas 2.0

aplicaciones infantiles para ipadQueremos agradecer al Instituto Nacional de Tecnologías Educativas y de Formación del Profesorado (Intef, dependiente del Ministerio de Educación) que haya considerado nuestro proyecto merecedor de ser incluido en la Red de Buenas PrácTICas 2.0. Agradecemos enormemente el artículo que hoy dedican en su web a cappaces.com

Nos gustaría pensar que podemos contribuir a extender la idea y la necesidad de dotar a los niños con diversidad funcional, de herramientas que les permitan lograr los mismos objetivos que los niños no condicionados por esta circunstancia. Lo importante es alcanzar un destino, independientemente del camino y los medios utilizados para llegar hasta él.

Las tabletas van a constituir, sin duda, una herramienta imprescindible para los niños con diversidad funcional, bien sea ésta motriz, sensorial, intelectual o conductual. La increíble precisión de la pantalla táctil las hace accesibles a un amplio sector de personas con discapacidad. La cantidad ilimitada de aplicaciones que existen permiten, además, encontrar herramientas y actividades para todo tipo de edad y circunstancia.

Por otra parte, el coste de las tabletas, su manejo y su portabilidad las dotan de muchas más ventajas que los portátiles/PCs y cualquiera de los periféricos adaptados, imprescindibles para su utilización y cuyos precios son disparatados y absolutamente prohibitivos. Cualquier dispositivo que se acompañe de la palabra “adaptado”, parece multiplicar su coste por 10.

Lamento la rigidez de la Administración y su ceguera para no entender ni aprovechar las posibilidades de las tabletas. Soy consciente de las restricciones que las actuales circunstancias económicas imponen pero, incluso en este aspecto, el iPad y resto de tabletas sólo ofrecen ventajas. El coste de uno de los equipos con que la administración suele dotar a los alumnos con necesidades educativas especiales (portátil más periféricos adaptados), podría sufragar un par de ipads, doblando así el número de alumnos beneficiados.

Las ventajas descritas se refieren sólo al plano material. Otras cuestiones mucho más importantes a las que también contribuyen, como son la autonomía y el incremento de la autoestima, resultan incalculables.

cappaces.com en Buenas Prácticas 2.0

Jornadas sobre TICs organizadas por la Asociación Gallega de Atención Temprana. Santiago, 6 octubre

Las (TICs) Tecnologías de la Información y la Comunicación en el ámbito de la Atención Temprana.

Muchísimas gracias a AGAT (Asociación Galega de Atención Temperá) por invitarnos a compartir nuestra experiencia en el transcurso de las Jornadas que se celebrarán el próximo 6 de octubre en el MUPEGA (Santiago de Compostela) bajo el título “As (TICs) Tecnoloxías da Información e a Comunicación no ámbito da Atención Temperá”.

Tan sólo espero poder estar a la altura de mis maravillosas, expertas y combativas compañeras de mesa, Cuca da Silva e Inés Casal, así como de los compañeros de TADEGa (Tecnoloxías de Atención á Diversidade na Educación Galega).

TICs aplicadas a discapacidad y diversidad

Jornadas AGAT sobre las TICs aplicadas a la diversidad