“Nosotras también existimos, nosotras también follamos.”
Telmo Irureta recibió ayer el Goya a mejor actor revelación y fue así de contundente en su discurso de agradecimiento.
A mi lado, un chico de dieciocho años que también sueña con ser actor, no paraba de repetir: “Tengo ganas de llorar”.
Y yo no puedo siquiera imaginar la emoción que se debe sentir al ver a una persona que comparte tu misma opresión llegar a un lugar con el que tú también sueñas, en unos espacios donde nunca hay cuerpos, ni voces, ni rostros como los de Telmo y Antón.
“Brindemos hoy por un cine más inclusivo y con cuerpos de todo tipo.”
Al primer sitio que me llevaron ayer las palabras de Telmo fue a Antonio Centeno y a su “Yes, we fuck!”. El derecho a la sexualidad de las personas nombradas por la discapacidad (convertido en tabú), el debate alrededor de la asistencia sexual, de los cuerpos no normativos… Todo está en el proyecto de Centeno.
***Actualización de estado: Hoy es el momento de celebrar a Telmo. Llevo todo el día eliminando mensajes horribles y bloqueando a capacinazis disfrazadas de feministas. Y así seguiré hasta el infinito y más allá. Estoy leyendo cosas tan horribles que dan ganas de llorar. Ya os vale. ¡Ya vale!